Doris Heintel se jubila tras 46 años
Donde antes había una máquina de escribir, ahora hay dos pantallas, un ordenador y una impresora. El único material de trabajo que recuerda a Doris Heintel sus comienzos en Linseis es la pila de papeles que tiene sobre la mesa. «¡Todavía no se ha despejado del todo, pero cada vez hay menos!», dice Doris Heintel.
La Sra. Heintel comenzó su formación como empleada industrial en el domicilio particular de la familia Linseis el 1 de septiembre de 1977. Fue testigo directo de cómo la empresa familiar se convirtió en una mediana empresa internacional. Al principio, redactaba presupuestos para los grabadores de datos de la época por un salario de formación de 415 marcos alemanes y se encargaba de que los envíos al extranjero se realizaran sin problemas. Vivió la transición de las máquinas de escribir a los ordenadores, de los archivos de clientes a los programas informáticos de relación con los clientes y el cambio de tres generaciones en Linseis.
Los directores generales Claus Linseis, Dr. Vincent Linseis y Florian Linseis agradecieron a Doris Heintel sus muchos años de lealtad y su excelente trabajo, y le desearon una jubilación tranquila.
También hubo regalos y palabras de agradecimiento por parte de los empleados.